Una de las realidades más fehacientes en el mundo, es la existencia de una sociedad multicultural, donde costumbres y religiones hacen que las personas se deban de forma espiritual y cultural a algo o alguien. Es por esto que el mundo necesita de algo en que creer.
San Antonio de Padua forma parte de la religión cristiana católica, siendo un santo reconocido y bastante venerado. Es uno de los Santos que es conocido bajo varios nombres entre esos el Santo de Todos en el mundo siendo a su vez seguido mayormente por el conglomerado de humildes.
Oración a San Antonio de Padua
Empezando la oración, se tiene ¡Oh Nuestro San Antonio de Padua, tu que le sueles dar el pan a los más humildes, siendo la alegría para todos. Después de esto sigue el te bendecimos señor, tu que das alimento a las aves, mandas la lluvia, y crecen los pastos, te dan las gracias señor.
A continuación, se afirma que los humildes busquen tu pan, tu lengua se encuentra en sequía por sed, se van a alegrar en Yahvé. San Antonio de Padua, tu el fiel consolador de quienes son afligidos, sintiendo una gran compasión por los humildes.
Luchador de causas nobles, defensor de los desposeídos, aquellos que como blancos fáciles cayeron en manos de los poderosos. Luego de una breve pausa, se exclama, ante ti me presento santo de el Señor, para venerar el poder que intercede ante dios.
Seguido de un, tu que supiste dar el sí al padre y así renunciar a tentaciones de la vida, ya que fue más verídico escuchar la voz del padre, prosigue con un, padre amado que supiste ayudar a todo necesitado, que lograste milagros y quien protegió siempre a los pobres.
Aquí han venido tus hijos San Antonio de Pagua, a hacerte una necesaria petición para una respuesta tuya. Porque nunca se pudo oír el un jamás alguien ha recurrido a ti, sea abandonado. De tal manera vienen tus hijos ante ti que consuelas a los afligidos y eres nuestro amigo, no nos abandones.
Dígnate ¡San Antonio de Padua! Escucha nuestros ruegos y que nos mires con unos ojos piadosos, para alcanzar favores que te pedimos, necesitamos de ti. Finalizando se piden: ayuda para las mentes y corazones, para aumentar nuestra fe, para amar a Jesús.
Para cerrar de forma puntual, se dan las gracias a este santo y se dice: alzaremos las manos a los cielos, ¡Oh glorioso como alto! Dios en el nombre del señor. De esa manera se cierra la oración de San Antonio de Padua.
La oración textual suelen tenerla personas más adeptas a la religión, pero es cómodo adaptar las oraciones para hacerlas de todos y poderse pronunciar en conjunto o en petición ante un conglomerado de personas.
Así como esta, hay muchas más oraciones y por tanto, muchos más santos que pertenecen bien sea a esta religión u otras cuyas costumbres y actividades religiosas conllevan a rezos y buenas acciones cuyo fin es la protección y el buen accionar en nombre del señor.